martes, 29 de junio de 2010

Tomar desiciones


Pocas cosas tengo la certeza que son realmente difíciles; una de ellas es tomar una decisión.

Etimológicamente decidir es "hacer un corte" en un proceso, pero en cuestiones de acción decidir tiene tanta importancia como la vida o como la muerte.
El decidir lo que me gusta, lo que quiero, lo que necesito, lo que siento, lo que me interesa, lo que me conviene... viene a acarrear una serie de reacciones alrededor tan distintas -algunas a favor, otras en contra- que muchas de las veces preferimos o bien no tomar decisiones o -en el caso de quienes les importa mucho la opinión del resto- hacer lo que nos dejará mejor posicionado ante ellos, convirtiéndonos en títeres del resto y lo peor: convirtiéndonos en nuestro propio verdugo, un verdugo que aniquila nuestro verdadero ser.

Personalmente he tenido la grata experiencia de tomar mis decisiones y no las que convenienen a los demás -adivinaron- eso me ha atraído una serie de conflictos... ¡con los demás!, por ejemplo:

1.- La música que escucho (mis compañeritas de escuela querían que escuchara flans (wac) si no no me hablarían... jeje que pena preferí seguir escuchando a Queen);
2.- La carrera que estudié (mta imaginen el drama familiar por decidir estudiar lo que estudié) y ha sido uno de los más grandes regalos que me he hecho.
3.- El no irme a vivir con quien estuve tremendamente enamorada (estaba enamorada no mensa)
4.- El no apoyar ciegamente a mis amigas a enjuiciar a alguien: mta jeje, eso me acarreó quedarme sin amigos (y con esos amigos ¿para qué quería enemigos?)
5.- El quitarme los ojos de la venda respecto al infeliz que me manipuló a su antojo, (estas palabras las recuerdo cada que necesito: "jajaja Señora ¿hacerme yo daño por ella? jajaj por favor, eso se lo digo a ella pero no crea que es verdad"
6.- El casarme y tener hijos (mm fue nuestra decisión pero creo que ha sido de las pocas que me han celebrado y de las que sigo plenamente convencida).
7.- Mi lucha: y no me refiero a la de Hitler, me refiero a que a fin de cuentas cada cosa que hago defiende lo que quiero, lo que pienso, lo que creo y lo que soy...

En fin... les podría escribir más ejemplos pero no es necesario, vivo sin estar de acuerdo con muchas cosas, vivo contracorriente, vivo tratando de aplicar lo que me enseñaron estaba bien, me molestan los tramposos, los corruptos, los cínicos, los abusivos, los hipócritas, los convenencieros, los valemadristas, los que no aman la vida, los aprovechados, los mojigatos, los pendejos, los vanos, los tiranos, los manipuladores, los chantajistas...

A fin de cuentas es mi decisión decirlo, manifestarlo y hacerlo ¿no?

jueves, 10 de junio de 2010


Hoy es 10 de junio del 2010, o sea un dia antes de que el mundo se convierta en zomibe por ver los partidos de futbol, la mayoría se ha contagiado, diria contaminado del virus de la pelota, no es malo, de hecho un poco de alegría a este deprimido pais le vendría bien, pero la verdad no se cómo puedan unirse a la celebración del gol 44 mil trabajadores arbitrariamente desempleados, o los papás de Martín y Bryan Almanza, niños asesinados por elementos del ejército mexicano, o la mamá familiares y amigos de Sergio Adrián Hernández Güereca, asesinado con toda alevosía por un gringo de mierda (perdón escribí un pleonasmo)en NUESTRO TERRITORIO, o los papás de los niños muertos por el incendio en una guardería, o los papás amigos y vecinos de los muchachos asesinados en una fiesta, o los amigos, familiares, vecinos que a diario ven como se mata en este pais a niños, jóvenes estudiantes, hombres y mujeres y ven igualmente como los funcionarios despectivamente tratan los problemas agarrando un avión yéndose a ver en vivo y en directo el gol. Seguro si tenemos razón para corear y hacer sánwiches.
Lo mismo, comerán papas fritas y verán en una superpantalla el desempeño de 11 hombrecillos(no, jamás del gabinete)mientras ven como el agua puerca de la última inundacion se llevó su vida entera.
Seguramente bailaremos al ritmo de waka y detrás nuestro nos wakarearán el Golfo de México y la pérdida de ejemplares. Todo esto no le va a importar a la mayoría en cuanto llegue el viernes 11 y por los parlantes en el estadio anuncien a la selección mexicana.
Carajo